Una explosión, al consistir en una liberación brusca de energía, produce un aumento de la energía cinética local de las moléculas cercanas al centro de la explosión. Eso comporta una diferencia de temperatura y, por tanto, una dilatación expansiva.
Esa dilatación expansiva es la causa de las ondas de presión u onda expansiva en los alrededores donde se produce la explosión. Las explosiones se pueden categorizar como.
